Por la mañana cuesta mucho trabajo levantarse para ir al trabajo y a otros menesteres. Sobre esto va la reflexión que hemos realizado hoy en la redacción este blog, donde se ha debatido los posibles beneficios que conlleva habituarse a tener un horario regulado por las mañanas, al menos de lunes a viernes.
El levantarse temprano por las mañanas se ha convertido en todo un reto para muchas personas. Si lo conseguimos ponemos el cuerpo activo y despierto aunque nos cueste tras los días festivos o de fines de semana. Es bien cierto que "al que madruga, dios le ayuda", tiene uno esa energía que gana en cuestión de horas tras despertarnos y nos proporciona bienestar y salud.
El paso de los días festivos antes de la vuelta al trabajo hace que estemos más perezosos para levantarnos, por que el cuerpo, muy sabio, se habitúa al descanso y; como no, también al trabajo en cuanto se coge el ritmo. El sueño hace descansar a las personas, tanto que hace que consigamos relajarnos y dormir con sus consecuentes beneficios como el sentirnos con más energía y con mejor bienestar corporal y mental.
Repetimos que el levantarse temprano es muy beneficioso: yo suelo madrugar mucho, sobre las cuatro o cinco de la mañana suelo estar despierto y aprovecho a las siete de la mañana para salir a andar, con lo que me sentía bien y más animado, beneficios mentales, pero sin embargo el cuerpo terminaba cansado sobre las once o las doce del mediodía. En definitiva, creo que es beneficioso. Los lunes tienen fama de ser el día más duro de la semana, aunque últimamente para mi ya no lo es. Parece que con la edad me encuentro más descansado ya que los fines de semana los aprovecho para descansar bien.
María Jesús, Paco y Diego.
2 comentarios:
El levantarse temprano es bueno si tenemos algo que hacer, una razón para empezar nuestro día. Levantarnos y estar inactivos hace que el día todavía se haga mas largo. Enhorabuena por el artículo.
¡Bravo!
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