Por suerte o por desgracia, más bien por desgracia, esta semana se está haciendo muy larga con los hechos ocurridos en París el pasado viernes. Mucho se está hablando y analizando, pero hoy nos llaman la atención las declaraciones del exjugador del Sevilla Frédéric Kanouté, musulmán de pro, dando un toque de atención a los gobiernos europeos y a la conciencia de todo el mundo en general.
Estas son algunas de sus palabras:
"Hay
que tener cuidado con sacar conclusiones precipitadas. Han demostrado
que esta gente son enemigos de todo el mundo. Esta
gente han demostrado que son terroristas y matan a gente sin
distinción de color, de religión ni de nada"
"Para
mi como musulmán, hay que decirle a la gente que esto no tiene nada
que ver con nuestra religión. Mi religión no incita a la
violencia, hay que decirlo muy claro. Hay que buscar los motivos
por qué esta gente hace estas cosas que no tienen sentido. Los
eventos no pasan por sí solos"
Desde
el 11-S no paro de tener que explicar que mi religión no tiene nada
que ver con todas estas atrocidades. Un árbol que cae hace mas
ruido que un bosque que crece".
Esto
nos toca a todos. Una vida francesa no tiene más valor que la
de un niño palestino que muere todos los días, o en Siria, Irak,
África. En Europa todo el mundo se solidariza y se vuelca
cuando pasa en un país europeo o americano y si pasa fuera no pasa
nada. Espero
que podamos vivir en paz unos con otros. No se puede arreglar con una
varita mágica pero hay que buscar soluciones".
Sobre estas declaraciones de Kanouté de que todo el mundo musulmán no hace barbaridades y que se tienen que buscar los motivos y los porque esta gente realiza estos actos terroristas, reconocemos que estamos de acuerdo con él, todos los seres humanos somos iguales y no debemos pensar que unas vidas valen más que otras. La vida de unos y otros tienen el mismo valor pero el sistema hace que haya ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda dependiendo de muchas cosas.
Independientemente de la motivación de cada uno, el fin no justifica los medios, nada vale la pena ante el derecho a la vida. A los terrorista hay que exigirle antes de cualquier negociación que abandonen las armas, pero ¿como hacerlo en este conflicto?. En España tenemos, desgraciadamente, la experiencia del terrorismo de ETA y el Terrorismo radical islámico y no cabe ningún tipo de excusa ante tales hechos. Cada persona puede tener la interpretación que quiera, ya que todo se puede interpretar pero los hechos están ahí. Nada justifica el uso de la violencia. La Justicia es el único camino para atajar este problema, detener a los terroristas y juzgarlos. Así también, nada justifica los bombardeos masivos ya que estos solo conllevan al aumento de los odios entre los contendientes.
Enrique H. y Lorenzo.
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