La actualidad política llama a las puertas de cada casa. El llamado choque de trenes entre el Govern catalán, presidido por Puigdemont, y el gobierno central, presidido por el señor Rajoy, nos aboca hoy a opinar sobre política. Pero no os vamos a descifrar quién lleva más razón de los dos. En el trasfondo, subyace una fuerte manipulación informativa por ambos lados que nos lleva a un aumento grave de la intolerancia.
Partiendo que la política no me gusta, bueno, han hecho que no me guste y mucho menos que la entienda: opino que estas rencillas entre comunidades, ciudades y pueblos de un mismo país estamos enfadados los unos con los otros sólo porque los mismos políticos nos enfrentan, nos hacen sentir Españoles de diferentes clases y nosotros lo permitimos cosa que nunca deberíamos consentir. Deberíamos respetarnos, unirnos, tolerarnos y ayudarnos, no somos personas de un solo sitio sino del mundo.
A mi tampoco me gusta dedicar mi atención a la política, sólo en el caso de lo que ocurre actualmente en España, diría que, lo principal, lo más crucial es que un pésimo sentimiento como el odio se atenúe hasta desaparecer, el odio de unos y otros. Que lo que sucede en este país no consista en una confrontación constante, lo contrario es una irresponsabilidad propia de inconscientes recalcitrantes.
Laura y José María.
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