viernes, 16 de septiembre de 2016

NO HAY PAZ PARA LOS REFUGIADOS.

El problema humano de los llamados refugiados, eufemismo para denominar a personas que huyen de la guerra y el genocidio sin ningún destino sigue siendo de máxima actualidad hoy por hoy. Los españoles debemos acordarnos que fuimos ayudados y acogidos, tanto por países europeos como del continente americano, cuando emigramos para trabajar y se huía del régimen fascista.

Tampoco es posible olvidar que Estados Unidos es un país creado por aquellos emigrantes de Europa que ahora niegan la ayuda de cientos de miles de personas que necesitan de nuestra solidaridad. Así mismo, los países del Este de Europa fueron apoyados debido a dictaduras sanguinarias y persecuciones de etnias entre sus ciudadanos.En la guerra de la antigua Yugoslavia se intervino por estar ocurriendo un genocidio.

Alemania, que fue reconstruida con la institución del Banco Mundial después de la II Guerra Mundial y no se le impuso ninguna sanción, hoy es la meta para muchos de estos emigrantes refugiados. En el siglo XX se ha procurado mejor o peor entender el mundo como un conjunto de poblaciones interrelacionadas e interdependientes, al menos esto está en los planes de estudios sobre economía.

Existen intereses que impiden la ayuda y la acogida a estas personas llamadas refugiados, intereses económicos sobre el petroleo, no sólo es la indiferencia sino que además se producen obstáculos intencionados para solucionar esta tragedia a la que no se le da la misma notoriedad y que sigue existiendo y empeorando.

José María "El Tempranillo" y Diego "Corrientes".

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