El adelanto de las elecciones autonómicas por parte de la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, da que pensar. Por un lado parece una huida hacia delante. Al ver irrumpir nuevos partidos con bastante fuerza, da la sensación que convoque elecciones para pillarlos en mitad del camino, sin la suficiente preparación para afrontar unas elecciones.Por otra parte es como si tirara piedras sobre su propio tejado, viendo las encuestas, que pronostican que el PSOE no lograría una mayoría absoluta.
De ser así, se vería obligada a llegar a acuerdos o pactos, con esos mismos nuevos partidos (Podemos y Ciudadanos), por los que se supone que adelantó las elecciones, a no ser que pacte con el PP, cosa que ella misma ha dicho, no entra en sus planes.
Sea como sea, esperemos que el nuevo gobierno de Andalucía que surja de las urnas, se preocupe de verdad por los problemas de los ciudadanos andaluces: el paro, la dependencia, la sanidad, los desahucios, la educación, las desigualdades, cambiar el modelo productivo de una vez por todas (no solo debemos ser un Parque Temático para el Turismo),... y deje de lado los asuntos internos de dicho gobierno, o de los partidos integrantes en una supuesta coalición. Eduardo.
Colabora luqca.
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