jueves, 7 de julio de 2016

LA MAGIA DE LOS LIBROS.

Mi idea hoy aquí era hablar de libros y dar a conocer cuales son mis preferidos, pero aunque al final añadiré alguna de mis lecturas de hace años, yo hoy quiero hablar de los mundos que hay detrás de los libros. Algunos son totalmente irreales, otros están mezclados entre la ficción y la realidad. Pero son los que están pensados en algo que es o puede llegar a ser real, los que realmente te hacen pensar y reflexionar. Y a veces son capaces de hacerte viajar a un mundo diferente al tuyo, aunque sea por un rato y sepas que no es real.

Hace ya unos años, en 2008, leí por primera vez "La sombra del viento", libro con mucho éxito del escritor Carlos Ruíz Zafón. Con este libro descubrí que se le puede llegar a coger cariño a personajes ficticios, que no son reales pero con los que te llegas a identificar de alguna manera. La lectura puede ser una forma de suplir la falta de experiencias de uno mismo, incluso llegan a ser una fuente de conocimiento inagotable.

Ahora me estoy leyendo un nuevo libro que se llama "El día que el cielo se caiga" (compaginado con "El manuscrito de Avicena"), un libro que ha salido recientemente y que está teniendo mucho éxito, de la escritora Megan Maxwell. Llevo pocas páginas leídas pero parece un libro muy tierno, pero a la vez puede ser duro. Si quieres conocer el desenlace de esta tierna, emotiva y dura historia de amor y amistad, no te lo pierdas.

Por otra parte, mi compañero, los últimos libros que ha leído son de novela histórica y narra la vida de Musa, un guerrero musulmán que combatió al imperio cordobés y la verdad que me traslado a esa época, siendo muy divertido. A mis 33 años la lectura no deja de sorprenderme, aunque tiene que ser un libro que me llegue a fascinar para poder terminar de leerlo.

Según el ultimo barómetro del CIS, el 40% de los españoles no a leído un libro y el 7% solo a leído uno. Desde aquí os animamos a cambiar ese porcentaje para el próximo barómetro, ya que la lectura es algo apasionante que no deberíamos dejar de hacer.

José Antonio y Rafael Sanchez.



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