Durante estos días hemos estado en vilo viendo las noticias sobre el rescate de tres experimentados montañeros y espeleologos españoles accidentados en Marruecos, de los que desgraciadamente han fallecido dos, y hemos estado debatiendo en el grupo sobre las consecuencias de los deportes de riesgo y sobre la tardanza en el rescate de estas personas.
El montañismo y la espeleología son prácticas deportivas de alto riesgo, donde se necesita una gran formación física y técnica para salvar los innumerables obstáculos que se les presentan, además de dejar constancia a otras personas o instituciones adecuadas el conocimiento de que es lo que van a realizar y en que lugar, para que de esta forma, en caso de accidente como el ocurrido en Marruecos, tenga las menores consecuencias negativas posibles, ya que, como ha sido el caso, poner los medios adecuados para ser socorridos con la celeridad necesaria y sin poner en riesgo a más vidas.
En cuanto a la tardanza en el rescate de estas tres personas, nos parece incomprensible la falta de coordinación y buen entendimiento entre los gobiernos de Marruecos y de España, ¿será por cuestiones de orgullo?, ¿será por los tira y afloja entre estos dos gobiernos?. Cuando se trata de salvar vidas, se debe poner toda la carne en el asador para facilitar las operaciones necesarias, y en este caso algo bastante gordo habrá tenido que pasar para que no se hayan realizado las cosas como hubiese sido deseado.
Eduardo, Manuel e Ignacio.
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