"Quiero morir porque amo la vida", ésta es una frase de las más repetidas de los enfermos terminales, que no les dan a elegir entre vivir o morir dignamente sin convertirse en un vegetal. En España la eutanasia está prohibida, sólo la sedación paliativa es lo único que está permitido.
Mientras tanto los enfermos que sufren enfermedades incurables tienen que seguir malviviendo entre terribles sufrimientos que sólo los medicamentos puede aliviar en parte. Pero sin embargo nadie hace nada por ellos. La Iglesia condena la eutanasia y los políticos se desentienden del problema, claro como no les afecta a ellos, no saben lo que es el sufrimiento ajeno.
Yo creo que este sufrimiento innecesario se debería de evitar y hacer una ley que permita al enfermo decidir libremente lo que quiere hacer con su vida. Cada individuo debe elegir cuando debe llegar su fin, cuando está en una fase terminal.
Para terminar quiero decir que no sería necesario llegar al final como en la película de "Mar adentro" en la que tienen que ayudarlo para conseguir su propósito: ser libre y morir libre.
j3eles.
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